La actividad se realizó en el IES 25 de Abril de Alfafar (Valencia). Gracias a la colaboración de Luz, la orientadora del centro.
N. leyó una carta y a continuación pusimos un power point explicativo. Después fue el turno de preguntas y comentarios. Los compañeros consultaron muchas dudas que tenían...
Varios compañeros le pidieron disculpas entre lágrimas por no haberle tratado en ocasiones de forma adecuada, por haberle gastado bromas.
Acabó llorando el 90% de la clase. La verdad es que fue muy emotivo ver cómo encontraban respuestas a algunas preguntas que tenían sobre la forma de ser de N.
Os dejo con la carta que leyó a la clase... No lo podría haber explicado mejor...
Y grande esa mamá, apoyándole 100% y bien nerviosa y emocionada...
SÍNDROME DE ASPERGER
Conjunto de rasgos y características similar al
autismo que afecta más a chicos que a chicas
Hola. Hoy me gustaría hablaros de mí.
Antes de
comenzar os tengo que decir que, aunque
esté mal decir esto, tengo que reconocer que me siento orgulloso de ser
como soy… ser diferente no es malo, ser diferente te hace ser único.
Muchos de vosotros me conocéis desde pequeños.
Otros en el instituto.
Sabéis que mi forma de ser es diferente a la de
la mayoría de vosotros, y eso se debe, principalmente, a que tengo algunos
rasgos del Síndrome de Asperger.
Algunos de vosotros habréis visto series como
“doctor Mateo”, “frágiles”, “Sherlock Holmes”,
películas como “Millenium” “Adam””Mi nombre es Khan”. En todas ellas hay
personajes con este síndrome.
¿Y eso qué es? Es una forma de ser caracterizada
por la falta de habilidades sociales, es decir, nos cuesta relacionarnos con
otras personas, NO porque NO queramos, SINO PORQUE NO SABEMOS COMO HACERLO
El síndrome en sí tiene una serie síntomas , en
algunos de los cuales yo he mejorado con el tiempo, con mucho trabajo y
esfuerzo y otros en los que necesito ayuda sobre todo de las personas con las que estoy la mayor parte del tiempo, como
sois vosotros.
De pequeño yo creía que me costaba relacionarme
porque estaba la mayor parte del tiempo
inmerso en los estudios por lo que me sentía culpable; pero cuando mi madre me
explicó que mi forma de ser se debía a otro motivo del cual yo no era responsable, sentí un gran alivio y
alegría, sobre todo al conocer que existe más gente como yo.
Para que os hagáis una idea, os detallo algunas de las características de
mi forma de ser desde peque
Me
sabía todos los números con 2 años y las letras mayúsculas, aprendidas
de las matrículas de los coches. Conocía
las marcas de los vehículos.
Aprendí
a hablar sobre los 4 años, utilizando la 3ª persona y tipo telegrama.
Cuando hablaban conmigo no prestaba
atención ni miraba a la cara.
Con el tiempo, aprendí a utilizar frases
pero no lo hacía correctamente
Siempre llevaba “algo en la mano” (con 16
años lo sigo haciendo… si tengo que poner la mesa, por ej. lo hago con una mano
pues la otra la tengo ocupada, aunque no lo hago de forma consciente): me ayuda
a controlar mi ansiedad.
No entendía 2 órdenes seguidas.
Al darme instrucciones tenían que ser muy
precisos con lo que me estaban pidiendo (ej. no es correcto decir “dame tu
móvil” pues yo interpreto LITERALMENTE, cuando lo que me están diciendo es dame
“tu numero de móvil”).
No entendía los dobles sentidos de las frases (ironía),
ni las bromas.
Al tener dificultad en expresar mis
sentimientos , me creó, con 9 años,
estados de ansiedad, debido sobre todo a la actitud desafiante y maltratadora
de algún compañero de clase.
Hoy tengo 16 años. Muchos de los aspectos
mencionados anteriormente he conseguido mejorarlos, aunque siguen formando
parte de mi forma de ser.
Necesito que las instrucciones sean
claras y concisas (por ej. a veces me agobio en Educación física porque no sé
exactamente qué hay que hacer pues me
cuesta entender las instrucciones)
Me considero una persona responsable
tanto académicamente como socialmente (intento no lastimar a nadie
conscientemente, respetar las normas cívicas como no tirar papeles al suelo, no
romper ni estropear mobiliario urbano, etc)
No me considero una persona mentirosa.
Cuando se me trata adecuadamente,
respondo con una actitud positiva ( es decir, me resulta fácil ayudar, entablar
conversación positiva… )pero cuando considero que me tratan mal me resulta
difícil actuar de esta manera; aunque creo que esto nos ocurre a todos… a todos
nos gusta que nos traten bien
A veces mi comportamiento no es correcto y tengo la
capacidad de disculparme (aunque en ocasiones
hayan sido mis familiares quienes hayan tenido que explicarme que no he actuado bien o puedo
a ver molestado con ese comentario a alguien… cosa que cada vez es menos
frecuente, pues voy aprendiendo en qué situaciones puedo haber ofendido.) He
aprendido que esta actitud es valiente, pues no todas las personas somos
capaces de reconocer nuestros posibles errores y rectificar.
Lucho por integrarme, pero algún
compañero en alguna ocasión me ha dicho que mejor que no vaya con ellos porque
soy “antisocial”. Considero que no soy “eso” porque me esfuerzo para mejorar en
cosas que para vosotros es fácil pero para mi resulta muy difícil. No lo hago a
propósito, necesito de vuestra paciencia y sobre todo ayuda para que me
integréis en el grupo
Mi mayor
“problema” con los compañeros con respecto a las dificultades de las relaciones
se basan en:
. cuando hablan en grupo, en ocasiones, no consigo
seguir la conversación.
. cuando me hablan varias personas a la vez, no puedo
entender a nadie y me crea malestar.
. cuando estoy en una conversación con varias personas,
no puedo encontrar hueco para hablar yo, pues cuando lo intento, continuan hablando
sin darse cuenta
. cuando hablo y me interrumpen, estoy muy incómodo, por
eso me marcho
Mi
tono de voz es alto y aunque muchos consideren que chillo, no es mi
intención, pero no sé modularla, pues no soy consciente de ello hasta que me lo
dicen.
Cumplo las normas y me cuesta ser
flexible cuando hay que romperlas por algún motivo ( por ej. si tenemos que
hacer un trabajo y tenemos fecha de entrega, me pongo nervioso de ver que el
trabajo no se realiza en las condiciones indicadas)
No soy hipócrita. Si alguien me ha hecho
daño o me ha molestado, no soy capaz de hacer cómo que no pasa nada, me enfado
y lo demuestro no dirigiéndole la palabra. Aunque es verdad que si se
disculpan, también perdono fácilmente.
Una de las cosas que me causan más
problemas con algunos compañeros es mi inflexibilidad ante las tareas , pues no
soy persona de hacer “trampas” en los estudios y considero injusto que se
aprovechen de mi trabajo. Por ej. Si hago los deberes, no considero justo tener
que prestarlos para copiarlos. En cambio no tengo ningún problema en emplear mi
tiempo en ayudar y explicar cualquier cosa que se me pida o prestar apuntes
(siempre que sea en momentos adecuados…
no durante la clase por ej. si está el profesor explicando).
Soy
muy respetuoso, sobre todo con los adultos y personas con dificultades.
Necesito que me anticipen las
situaciones, los planes de salida, y cualquier cosa que interfiera en mi rutina
diaria.
Como véis son muchas las dificultades a
las que me enfrento cada día, muchas de las cuales no sé cómo debo actuar y que
me ocasionan angustia y sufrimiento.
El hecho de explicaros todo esto es
porque necesito que intentéis entender
el porqué actúo de esta manera, viéndome desde otro punto de vista y que me ayudéis si es vuestra intención, sabiendo
cuales son mis mayores dificultades.
Enhorabuena Laura por tu trabajo, y por tu sensibilidad para conducir la sesión. Felicitar a nuestro protagonista por su valentía, y al grupo de clase por su empatía, su capacidad de reconocer errores y pedir disculpas, y su comprensión.
ResponderEliminarUna experiencia educativa de las que sin ninguna duda deja una gran huella.